La estafa de la certificacion ecologica

Un amigo mio me ha informado que los consumidores están siendo estafados por sus gobiernos al certificar productos como ecológicos o biológicos cuando no lo son.

 

La certificación de agricultura ecológica o biológica permite el uso de elementos tan sumamente tóxicos como el azufre (S) (Anhídrido sulfuroso o Dióxido de azufre (SO2)   o el cobre (Cu) (Sulfato de Cobre (Caldo Bordelés) o como Oxicloruro de Cobre) por la sencilla razón de que son sustancias elementales. (también el Mercurio o el Uranio lo son) cuando se supone que una agricultura eco-lógica debería llevarse a cabo de manera totalmente naturista, y puedo asegurarle de que los tomates silvestres no tienen las cantidades alarmantes de azufre que en las hortalizas ecológicas se encuentra.

Incluso los productos etiquetados como Azufre “BIO” tienen en su etiqueta la calificación toxicológica de IRRITANTE (Xi) y tienen un periodo de seguridad de entre 3 y 15 días según fruto u hoja a consumir.
Acaso es esto una gran tomadura de pelo?

El azufre (mal llamado con el diminutivo de sulfito) afecta a todo el mundo, pues su eliminación es traumática para el organismo, pero existen grados de intolerancia, desde la aparente tolerancia hasta cuadro alérgico grave a sulfitos (azufre) que necesitará de hospitalización y medicación para evitar  llegar al grado más extremo, la muerte por choque anafiláctico.

La conclusión lógica es sencilla, nos están cobrando el triple por lo mismo es decir que nos están estafando. Lo peor es que esta información la ha sacado a la luz un particular y no un productor ecológico, lo que me lleva a pensar que ninguno está realmente concienciado y lo único que ven tras esta “moda” es un negocio. Porque seamos sinceros, se está tratando de controlar y certificar la agricultura de toda la vida de Dios.
Soy un afectado por el crecimiento descontrolado del uso de  azufre inorgánico o el azufre elemental ya no solo en la agricultura industrial moderna sino en la agricultura que está certificada como ecológica en la Unión Europea.

Tardé años en descubrir esto mientras que creía estar seguro comiendo productos ecológicos que me costaban el triple.

La mayoría de alimentos “naturales” (incluido los certificados como ecológicos) me desencadenan ataques asmáticos, bronquitis, silbido, dolor torácico, dolor abdominal, diarrea, fatiga, síndrome químico múltiple, etc.. por su alto contenido en azufre (sustancia altamente tóxica, más aun que el cianuro). De hecho este grupo de síntomas empieza a conocerse con el nombre de “Síndrome del vegetariano”. Crea que es francamente escaparse hoy día de esta lacra tóxica.

El azufre es usado en agricultura masivamente para prevenir y exterminar varios tipos de hongos (oidio, etc..) y ácaros.  No hay un control sobre esto. El azufre es la base de la mayoría de los pesticidas del tipo fungicida y acaricida es el azufre, elemento químico básico con símbolo “S” y que se encuentra de forma natural en regiones volcánicas. Y es un mineral altamente tóxico y venenoso, más que el cianuro.

Dada las cada vez más personas que empiezan a ser sensibles a la gran cantidad de azufre en nuestra dieta y a los terribles de salud que desarrolla, las leyes se han visto en la necesidad de en los productos con más índices de azufre avisar en la etiqueta de lo siguiente: “Contiene sulfitos”

 
Por qué le llaman sulfitos, si realmente el origen es azufre (sulfuro)?
La respuesta no es complaciente, pues parece más un intento de suavizar el asunto con un diminutivo de “sustancia natural” que otra cosa y guardarse las espaldas.



Por otra parte, el azufre puro es fumigado en polvo en frutas, hortalizas, verduras y cereales ecológicos (y no ecológicos), los cuales no necesitan este etiquetado a pesar de superar por mucho estos 10mgrs/Kilo. No solo por el azufre superficial, sino por el que la planta asimila.

Por qué no le llaman azufre?

Con la oxigenación que el aire produce, el azufre se transforma en anhídrido sulfuroso o dióxido de azufre (SO2), esta molécula es la más abundante en cuanto a sulfuro en los alimentos se refiere, pero según científicos existe una forma de azufre “natural” formada y/o asimilada sobre todo en entornos ácidos como las siguientes:
-Bisulfito de potasio (SO3HK)
-Metabisulfito de potasio (S2O5K2)
-Sulfito de potasio (SO3K)
-Sulfito de calcio (SO3Ca)

Normalmente estas sales se encuentran en vinos, mostos, sidras, vinagres, champagnes, cavas, zumo de tomate, limón, manzana, cereza,  etc.. y es en estos productos donde más encontrará la indicación de “Contiene sulfitos” y los “especialistas” se refieren a estas sales cuando hablan de sulfitos pero la realidad es que no solo encontrará sales de sulfitos en ellos, sino que también encontrará en cantidades alarmantes el anhídrido sulfuroso o dióxido de azufre (azufre combustionado por el oxigeno) ya que el caso del vino las viñas son fumigadas sin piedad con azufre polvo con el inconveniente de que después de vendimiadas son llevadas a la bodega y exprimidas sin ser ni siquiera lavadas (aunque poco haría el lavado, pues el azufre es de naturaleza aceitosa y no se elimina fácilmente). Ahora sigue creyendo que los sulfitos son un inocente subproducto natural ?

Y aquí la mala noticia, esto ocurre hasta en el más caro y selecto de los vinos etiquetados y cobrados como “ecológicos”.

Por otra parte algunas de estas sales son sintetizadas y usadas en conservas que posiblemente incluyan el aviso de “contiene sulfitos” y que tienen los siguientes nombres y acrónimos:  ácido sulfuroso o Dióxido de azufre (E220), sulfito de sodio (E221), sulfito ácido de sodio (E222),disulfito de sodio (E223), disulfito de potasio (E224), sulfito de calcio (E25), sulfito ácido de calcio (E226) sulfito ácido de calcio (E227) y sulfito ácido de potasio (E228).

Es por esto que esta página pretende denunciar y demandar a las autoridades para que la certificación ecológica o biológica sea lo que su nombre indica, o de seguir siendo lo que es, una agricultura tóxica igualmente que se le modifique el título y no se llame ecológica, pues están estafando a las personas, aunque lo peor no es el perjuicio económico sino el de la salud.

Miles de personas en toda Europa compran alimentos con etiqueta ecológica pensando que están libres de tóxicos y esto no es la realidad.

Quizás la trampa está en que la definición de agricultura ecológica tiene un doble sentido, pues presume de ser respetuosa con el medio-ambiente pero nunca promete serlo con el ser humano.

En el folleto del Comité de agricultura ecológica puede leerse:
La Agricultura Ecológica es un sistema de producción que mediante el empleo de técnicas agrarias y ganaderas respetuosas con el medioambiente obtiene productos de máxima calidad nutritiva, organoléptica y sensorial, sin la utilización de productos químicos de síntesis tales como pesticidas, fertilizantes o antibióticos ni organismos genéticamente modificados”

Te fijaste que en ningún lugar dice “respetuoso con la vida humana”?

Recuerda, el Mercurio, el Plomo, el Uranio son respetuosos con el medio ambiente.


Demandemos una ecología real y no el negocio que está atentando contra nuestra inteligencia y salud.

2 comentarios:

Misae dijo...

Gracias por compartir. Me interesa mucho ya que soy vegetariana y suelo consumir productos ecológicos, aunque, por lo que voy viendo, va a ser mejor comprar a productores locales (las señoras de aldea de toda la vida que cultivan y venden a pequeña escala a fruterías de barrio)que a los que tengan certificado. No se salva nada últimamente, qué pena de mundo!

Anónimo dijo...

Fantástica información amigo, muchas gracias porque yo estoy un poco mosca con esto de las certificaciones ecológicas, la agricultura transgénica y todas estas moderneces para controlar los alimentos.
Mi abuelo (que en paz descanse, yo tengo 58 años)echaba la simiente del tomate en marzo y sin pesticidas ni tanta tontería criaba unos tomates que hace décadas no como.
Mucha gente al oírme decir esto me comenta que es que ahora hay muchas plagas que si no se le echan productos químicos los tomates no salen, pero la cuestión no es esa, la cuestión es de donde salen las plagas, y mucho me temo queridos que son un invento de los mismos que fabrican los remedios